Problemas de liquidez en plataformas de criptoactivos

Los recientes problemas de liquidez de algunas de las principales plataformas acrecientan las preocupaciones recientes sobre los criptomercados. La desconfianza parece instalarse en muchos inversores.

La semana pasada, la plataforma de criptoactivos Celsius, una de las más relevantes -con 8.000 millones de dólares prestados a clientes casi 12.000 de dólares administrados- anunció que interrumpía temporalmente las retiradas de fondos, intercambios y transferencias entre cuentas de sus clientes[1]. Celsius afirmó que tenía las reservas más que suficientes para cumplir con sus obligaciones y que dicha interrupción se debía a las "condiciones extremas" del mercado. Sin embargo, los problemas de liquidez de esta plataforma han generado preocupaciones en todo el universo cripto.

Al mismo tiempo, Binance, la plataforma de intercambio de criptomonedas más grande del mundo por volumen de negociación, también anunció que paralizaba temporalmente las transacciones con Bitcoin en un intento por estabilizar su liquidez.

Según la plataforma, la interrupción en el servicio, que se alargó durante tres horas, se debió a un problema técnico con el volumen de transacciones[2].

El resultado de estas disfunciones de liquidez ha sido un desplome de los criptomercados. La capitalización total del mercado ha caído por debajo del billón de dólares, lo que supone retroceder a los niveles de enero de 2021. Bitcoin, la moneda afectada por los problemas de Binance, ha caído por debajo de los 21.000 dólares. En los días en los que ocurrieron dichos eventos, Bitcoin cayó cerca de un 20%. 

Estos problemas de liquidez, unidos al reciente colapso de la stablecoin TerraUSD, aumentan los temores de los reguladores.

En cualquier caso, además de la huida de muchos inversores de estos activos con alto riesgo (risk off) ante el aumento de los tipos de interés, los expertos señalan que la reciente evolución muestra una desconfianza significativa hacia el valor subyacente de las criptomonedas y algunas de las plataformas que las respaldan[3]. Los supervisores se temen que los problemas de los criptomercados  terminen desencadenando un efecto contagio para otros  mercados financieros.