Empleo digital en el sector bancario

La industria bancaria está acometiendo un intenso proceso que está haciendo que muchas entidades financieras tengan que adaptar sus estructuras operativas. En un contexto más digital y abierto para oferta y demanda, los bancos tienen por delante, entre otros retos, la necesidad de incorporar capital humano con una formación más tecnológica.

Los retos del sector están haciendo que aumente la demanda de profesionales más especializados en áreas como computación o análisis de datos. Destaca la creciente demanda por parte de la industria bancaria de trabajadores con perfiles como ingenieros informáticos y matemáticos capaces de acometer, entre otras cuestiones, el desarrollo de aplicaciones para gestionar sistemas información, procesos de negocio y modelos avanzados de gestión de riesgos.[1] La banca ha dejado de ser una salida laboral prioritaria para graduados en economía y/o derecho. El sector busca talento en capacidades y habilidades “STEM” (acrónimo en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). La posibilidad de analizar y explotar el tratamiento de los datos para tomar decisiones es una competencia básica que deben disponer los nuevos profesionales del sector.

En este sentido, los actuales procesos de restructuración laboral que está acometiendo la banca responden a esa adaptación de perfiles  profesionales.

Algunas estimaciones apuntan a entre el 15% y el 20% de los nuevos puestos de trabajo creados en el sector bancario son resultado del proceso de digitalización.[2] La evolución de la industria hacia nuevos modelos de negocio basados en plataformas es aún más evidente tras la pandemia y ha hecho que este mercado tecno-bancario se haya dinamizado significativamente en los últimos dos años. Se observa, aú cómo las entidades bancarias están ya compitiendo, aún con cierta desventaja, en la captación de este tipo de profesionales con las empresas tecnológicas.

La habilidad del sector para poder atraer a estos profesionales será clave para poder competir con los nuevos proveedores de servicios bancarios de la era digital (BigTech, neobancos o empresas de telecomunicaciones, entre otros). En este sentido, muchos de los candidatos con este perfil técnico priorizan trabajar en entornos innovadores, flexibles, organizados y con jerarquías más horizontales. Esto requiere un cambio cuasi-cultural en la banca. En la transformación digital, no solo es importante contratar profesionales apropiados, sino también asegurarse que el equipo que los lidere esté integrado en una nueva cultura relacional más digital.