El boom de los pagos contactless en España

La tecnología de pagos sin contacto comienza a imponerse en las transacciones digitales de nuestro país. La comodidad de aproximar una tarjeta, dispositivo o teléfono a un terminal de pago para efectuar una compra está haciendo que los españoles adopten ampliamente esta opción. En los últimos años se observa un crecimiento significativo de los medios de pago contactless y se estima que continuarán haciéndolo en el futuro.

Un reciente estudio, elaborado por la consultora tecnológica Minsait[1], sitúa a España como el país europeo donde más crecen los pagos sin contacto. Según el informe, España es el país que ha experimentado el mayor crecimiento en el uso de tarjetas contactless en el continente europeo, un 9,2% más que en 2020. Entre los españoles que usan tarjeta, casi 9 de cada 10 (87,6%) paga con una contactless en los terminales de puntos de venta físicos. De los casi 88 millones de tarjetas – entre débito y crédito – emitidas actualmente en España, se estima que más del 80% serían tarjetas contactless.  El crecimiento de estas formas de pago radica en que son fáciles de usar, cómodas y rápidas. La posibilidad de pagar hasta 50 euros sin necesidad de teclear una clave PIN agiliza la operativa, lo cual es ampliamente valorado por los consumidores.

Un parte del auge de estos pagos contactless también estaría siendo capitalizada por los pagos con códigos QR. La pandemia ha favorecido que buena parte de la población se familiarice con su uso.

Algunos de estos pagos están asociados a la aplicación Bizum, usada ampliamente en nuestro país, que permite pagar en comercios físicos escaneando un código QR. Esta forma de pago también puede usarse para pagar y cobrar premios en las Administraciones de Loterías y Apuestas del Estado.

Por otra parte, debe advertirse que el aumento en el uso de los medios contactless ha sido posible gracias al crecimiento de la infraestructura de pagos de nuestro país. Incluso las pequeñas empresas y establecimientos tienen un TPV físico que acepta pagos contactless. Nueve de cada diez microempresas (89,2%) cuentan con un TPV físico que acepta los pagos contactless[1], aumentando 11,7 puntos porcentuales en los últimos cuatro años. 

En este sentido, la mayor parte del parque de terminales de pago con tecnología de aproximación ha sido implantado por las entidades financieras del país. Los bancos españoles fueron pioneros en Europa en emitir tarjetas contactless y en dotar a los establecimientos de terminales de pago habilitados para este tipo de transacciones.