Aunque la mayoría de la población española es consciente de que Europa se está quedando atrás en el desarrollo de la inteligencia artificial, solo el 35% estaría de acuerdo con flexibilizar la regulación de cara a fomentar la innovación en este campo. a encuesta Funcas sobre IA revela que el apoyo a la flexibilización tampoco es mayoritario entre quienes más familiarizados están con la IA, de modo que la mayoría de encuestados parecen priorizar la protección de la seguridad, la privacidad y la transparencia frente a los potenciales beneficios económicos de esta tecnología.