Las sanciones occidentales a Rusia están teniendo un doble impacto sobre Europa y España; en primer término, el cese paulatino de intercambios está elevando los precios de la energía y con ellos, la inflación, pero también se está notando un efecto no menos importante en la confianza económica. Es probable que en otoño sean aún más visibles estos impactos, sobre todo en determinados sectores. La perturbación geopolítica de fondo, señala Raymond Torres, podría representar sin embargo una oportunidad para España.