Elevadas pérdidas de inversores minoristas en criptoactivos

La mayoría de los criptoactivos, y en especial los más populares, están sujetos a una elevada volatilidad, lo que se traduce en potenciales pérdidas de valor para los usuarios.  Aunque tanto inversores institucionales como minoristas han comprado estos activos digitales, un reciente informe[1] del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés) ha puesto de manifiesto las elevadas pérdidas que habrían sufrido los inversores minoristas como consecuencia de su exposición a los criptoactivos.

Por una parte, el informe del BIS sugiere que los nuevos usuarios compraron estos activos digitales atraídos por la perspectiva de un aumento de sus precios. Cuando el valor de las principales criptomonedas estaba al alza, la cantidad media mensual de usuarios activos diarios pasó de alrededor de 100. 000  a más de 30 millones de usuarios en todo el mundo. El hecho de que la adopción crezca a raíz de los aumentos de precios sugiere que los usuarios ingresan al sistema atraídos por precios altos y con la expectativa de que sigan subiendo. Sin embargo, la realidad ha sido muy diferente. En total, el BIS estima que la industria de los criptoactivos perdió más de 450.000 millones de dólares en mayo de 2022 después del colapso de la stablecoin Terra. Además, en noviembre de 2022, se evaporaron otros 200.000 millones de dólares con la quiebra de FTX.

Desde 2015 a 2022, en casi todas las economías de la muestra del estudio (95 países), la mayoría de los pequeños inversores perdieron dinero en su inversión en bitcoins.  De hecho, la mitad de los minoristas habría perdido una media de 431 dólares a finales de diciembre de 2022, lo que corresponde a casi la mitad del total del dinero invertido en este activo digital.

El BIS estima que de mantenerse el ritmo de inversiones en criptoactivos, más de las cuatro quintas partes de los usuarios perderían dinero.

Estas pérdidas han sido mayores para los criptousuarios de algunas jurisdicciones. En particular, para los de economías emergentes como Brasil, India, Pakistán, Tailandia y Turquía. Las elevadas pérdidas de los inversores minoristas suelen estar asociadas al nivel de educación financiera. Un bajo nivel de educación financiera, que se materializa en el desconocimiento del riesgo que suponen estos activos, puede explicar por qué en dichas regiones se observan mayores pérdidas.

En comparación con los inversores institucionales, los datos sugieren que las pérdidas de los inversores minoristas han sido mayores. Se observa que los inversores más grandes y sofisticados tendían a vender sus criptomonedas justo antes de que los precios cayeran abruptamente, mientras que los más pequeños seguían comprando. Estos patrones resaltan la necesidad de una mejor protección de los inversores minoristas en la industria de los criptoactivos.