Encuesta Funcas sobre el coronavirus. Seis meses bajo la pandemia

Encuesta funcas sobre el coronavirus. Seis meses bajo la pandemia 

Fecha: 18 de septiembre 2020

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Dirección de Estudios Sociales – Funcas

Con el final del verano y el inicio del curso escolar se abre una nueva fase de la pandemia que comenzó abruptamente hace medio año y sobre cuyo punto final solo cabe especular. Mientras los contagios y las medidas para controlarlos siguen acaparando masivamente la atención de los medios de comunicación, los ciudadanos van tratando de recuperar sus pautas de ocupación y sus hábitos sociales cumpliendo, con más o menos rigor, las normas de comportamiento impuestas por los responsables políticos en los diferentes niveles de gobierno.

En este contexto tan fuertemente marcado por la incertidumbre sobre la evolución de la situación sanitaria y económica, la sociedad aparece como un sujeto con escaso margen de acción y expresión públicas. Sin embargo, las conductas y opiniones de los individuos importan mucho para entender mejor la situación que afrontamos colectivamente. Con este propósito, entre el 31 de agosto y el 11 de septiembre Funcas ha planteado una batería de preguntas a una muestra representativa de la población residente en España (1.357individuos de 18 o más años). Los resultados de esta encuesta se exponen a continuación ordenados en los siguientes puntos:

(1) El temor al contagio, línea de división de la sociedad (Cuadro 1)
(2) Un riesgo no exagerado, según la percepción mayoritaria (Cuadro 2)
(3) Una opción en la reserva: el confinamiento (Cuadro 3)
(4) Perspectivas económicas pesimistas (Cuadro 4)
(5) La importancia atribuida a las mascarillas: generalizada, pero con matices (Cuadro 5)
(6) La autoinculpación de la sociedad (Cuadro 6)
(7) Unas vacaciones más domésticas y breves (Cuadros 7a y 7b)
(8) La necesaria vuelta al colegio (Cuadros 8a y 8b)

(1) EL TEMOR AL CONTAGIO, LÍNEA DE DIVISIÓN DE LA SOCIEDAD (CUADRO 1)

El 96% de la muestra entrevistada responde negativamente a la pregunta sobre si se ha contagiado por coronavirus. Cuando a este amplio grupo de personas se les solicita, a continuación, que concreten el grado de temor ante un posible contagio, las respuestas arrojan la imagen de una sociedad dividida en dos mitades. En efecto, entre la población por debajo de 64 años que afirma no haberse contagiado (95,4%), quienes declaran temer mucho o bastante contagiarse (47%) y quienes lo temen poco o nada (53%) forman grupos de similar tamaño. La relación de fuerzas es menos equilibrada entre los entrevistados de 65 o más años: así, mientras que algo menos de la mitad de las personas menores de 65 alberga mucho o bastante temor a contagiarse, entre los mayores que declaran no haberse contagiado (97,9%), la proporción supera tres quintas partes (63%).

En este grupo de edad, el porcentaje más alto se encuentra en la respuesta que recoge el máximo temor: casi cuatro de cada diez mayores (37%) temen “mucho” el contagio. Sin embargo, entre los más jóvenes (18-24 años) solo un 11% afirma sentir un temor intenso.

Las mujeres reconocen en mayor proporción que los hombres temor al virus: tres de cada diez de ellas (29%) declaran tener “mucho” miedo a un contagio, una proporción que entre los hombres no llega a una quinta parte (17%). Por otra parte, en las grandes ciudades, la población menos temerosa ante el contagio prevalece sobre la más temerosa. En efecto, seis de cada diez entrevistados residentes en municipios de más de 500.000 habitantes declaran temer “poco” o “nada” contagiarse. En cambio, en las poblaciones de menor tamaño, la proporción de “poco” o “nada” temerosos no supera a la de quienes albergan “mucho” o “bastante” miedo a un contagio.

(2) UN RIESGO NO EXAGERADO, SEGÚN LA PERCEPCIÓN MAYORITARIA (CUADRO 2)

A pesar de que alrededor de la mitad de los entrevistados se declaran poco o nada temerosos ante la posibilidad de un contagio por coronavirus, no más de una cuarta parte (24%) considera que el tema del coronavirus y los riesgos del contagio se están exagerando (así lo piensa también la misma proporción de entrevistados mayores de 64 años). Entre los entrevistados con estudios universitarios, la proporción de quienes perciben exageración en el tratamiento de este tema es incluso menor (19%). Son los entrevistados más jóvenes (18-24 años) quienes en mayor medida suscriben esta opinión (30%), aun cuando dos terceras partes (67%) se muestran en desacuerdo con ella.

(3) UNA OPCIÓN EN LA RESERVA: EL CONFINAMIENTO (CUADRO 3)

Curiosamente, si bien las respuestas sobre el temor al contagio describen a una sociedad en la que a aproximadamente la mitad de sus miembros jóvenes y adultos (menores de 65 años) apenas les preocupa contagiarse, la proporción de entrevistados que, ante la llegada de una nueva ola de contagios, apoyaría un nuevo confinamiento es suficientemente amplia como para sugerir tanto la existencia de intranquilidad en la población como la confianza en que esta opción radical, al menos hasta que se descubra y aplique masivamente la vacuna, representa la “bala de plata” contra el virus.

Seis de cada diez entrevistados estarían de acuerdo con un nuevo confinamiento si se produjera una fuerte oleada de coronavirus en otoño, mientras que el 30% se manifiesta en contra. La opinión contraria al nuevo confinamiento está más extendida entre los hombres que entre las mujeres (32% frente a 28%) y también entre quienes cuentan con formación universitaria y los residentes en municipios de más de 500.000 habitantes (37% en ambos casos). La relación con el mercado de trabajo aparece asimismo como factor explicativo de la oposición a un nuevo confinamiento. La opinión contraria a esta medida está más extendida entre los que trabajan y los que están en paro (35% y 36%, respectivamente), y menos, entre estudiantes y pensionistas (23% y 27%). También las personas que viven en hogares con niños se muestran más contrarias al confinamiento: el 37% así lo declara, frente al 26% de los que viven en hogares sin menores de 16 años.

(4) PERSPECTIVAS ECONÓMICAS PESIMISTAS (CUADRO 4)

Teniendo en cuenta que, según todas las previsiones, un nuevo confinamiento tendría efectos devastadores para la economía española, llama la atención que la mayoría de la población muestre su apoyo a esta medida en caso de una nueva oleada de contagios, mientras mantiene, al mismo tiempo, niveles muy altos de pesimismo económico. Así se desprende de los resultados a la pregunta sobre si España saldrá de la crisis económica antes, al mismo tiempo o después que la mayoría de países europeos. Aproximadamente tres de cada cuatro entrevistados (73%) creen que saldremos después. Esta opinión negativa la comparte en mayor medida la población que trabaja (79%) y la joven (18-34 años: 84%), y también prevalece entre los encuestados con estudios universitarios (80%).

(5) LA IMPORTANCIA ATRIBUIDA A LAS MASCARILLAS, GENERALIZADA PERO CON MATICES (CUADRO 5)

Las investigaciones sobre la probabilidad de contagio del coronavirus han puesto de relieve su dependencia de variables como la distancia física y la ventilación. Los expertos coinciden en que esa probabilidad es significativamente menor en espacios abiertos que en espacios cerrados. Sin embargo, las respuestas de los entrevistados sobre la importancia del uso de la mascarilla sugieren que, en contra del consenso de la comunidad científica, el riesgo de no usar la mascarilla cuando se comparte espacio (dentro o fuera del hogar) con personas cercanas, pero no convivientes, se considera menor que el de no utilizarla en espacios públicos donde la interacción social es menor (por ejemplo, la calle o el transporte público).

Así, el 64% de los encuestados declara que es “muy importante” llevar la mascarilla mientras se camina por la calle, pero solo el 51% le atribuye la misma importancia cuando se está en la terraza de una cafetería. Aún más llamativo es el hecho de que solo el 44% considera “muy importante” llevar la mascarilla cuando se está en un domicilio particular con personas con las que no se convive. Si se incluye a los que creen que es “bastante importante”, el papel destacado de la mascarilla en los espacios al aire libre se refuerza: el 86% cree que es “muy” o “bastante importante” llevarla en la calle, el 79% lo considera así en una terraza, y el 73% en un domicilio con personas no convivientes.

En cada uno de los espacios planteados a los encuestados (en la calle, en una terraza, en el domicilio con personas con las que no se convive y en el trasporte público), son los jóvenes los que en menor proporción atribuyen importancia al uso de la mascarilla. Destaca, en concreto, que solo alrededor de uno de cada tres entrevistados entre 18 y 24 años afirma que la mascarilla es importante en una terraza. Aunque la mascarilla se considera mayoritariamente importante o muy importante en todas las situaciones por las que pregunta la encuesta, el transporte público acumula la mayoría más amplia. El 83% de los encuestados opina que es muy importante llevar la mascarilla cuando se utiliza este servicio público, a los que se les añade un 13% que la considera bastante importante.

(6) LA AUTOINCULPACIÓN DE LA SOCIEDAD (CUADRO 6)

A la hora de señalar sobre quién recae la principal responsabilidad por los malos datos sobre la pandemia que se publicaron día tras día durante el mes de agosto, convirtiendo a España en el país europeo con más contagios por número de habitantes, los entrevistados apuntan, sobre todo, a la sociedad. En concreto, ante la alternativa de atribuir la responsabilidad a la mala gestión de los responsables políticos o al mal comportamiento de la sociedad, cuatro de cada diez se inclinan por esta última opción (39%), el doble de los que ponen en su punto de mira a los políticos (19%). Un 35% optó (espontáneamente) por la respuesta que distribuye la responsabilidad a partes iguales entre la sociedad y los responsables políticos.

Aunque en todos los grupos minoritaria, la atribución de responsabilidad principal a los políticos es algo más frecuente entre los hombres (22%) que entre las mujeres (18%), y también es más frecuente entre la población con edades intermedias (35-64 años) que entre los encuestados más jóvenes (18-24 años: 16%) y los de mayor edad (65 o más años: 17%).

(7) UNAS VACACIONES MÁS DOMÉSTICAS Y BREVES (CUADROS 7a Y 7b)

Durante este verano, el 48% de los españoles ha pasado al menos una noche fuera de su domicilio habitual por motivos de ocio o descanso. Esta cifra supone una notable disminución respecto a la de 2019, que alcanzaba el 71%. El porcentaje de los que han disfrutado de vacaciones en 2020 es mayor entre los hombres que entre las mujeres (55% frente a 44%), así como entre los universitarios (64%) y las personas que viven en ciudades de más de 500.000 habitantes (68%).

Como cabría esperar, la edad aparece como un factor decisivo a este respecto. Mientras que el 72% de los encuestados entre 18 y 24 años declaran haber pasado alguna noche de este verano fuera de su domicilio habitual por ocio o descanso, solo el 26% de los mayores de 64 años lo hicieron. Esta mayor frecuencia de vacaciones en edades jóvenes se observa también en los datos referidos al verano de 2019, pero la disminución de los viajes en 2020 ha sido más intensa para los mayores. Entre los encuestados de 18 a 24 años la proporción de los que han tenido vacaciones disminuye del 86% al 72%, mientras que entre los mayores lo hace del 56% al 26%, es decir, se reduce a menos de la mitad.

Además, otras características como la duración media de la estancia o los destinos también han experimentado cambios sustanciales respecto a 2019. En concreto, la duración media ha bajado de 17 días a 14 y ha afectado de forma general a todos los grupos de sexo, edad y nivel educativo.

En cuanto a la elección de los destinos, la gran mayoría los ha escogido en el territorio nacional, creciendo además los viajes a destinos cercanos. Más de la mitad de las personas que han viajado este verano lo ha hecho dentro de su misma comunidad autónoma, mientras que ese fue el destino de solo un tercio de los encuestados en el verano pasado. Disminuye asimismo el porcentaje de personas que han visitado otra comunidad autónoma, pasando del 59% al 49%.

Pero la caída más importante se observa en los viajes internacionales. El porcentaje de personas que ha visitado algún país extranjero pasa del 22% del total de los que disfrutaron de vacaciones en 2019 al 6% en 2020, lo que supone que, respecto al total de entrevistados, solo un 3% ha pasado alguna noche en el extranjero este verano, frente al 16% del año pasado. Este descenso es particularmente acusado entre los encuestados con estudios universitarios, en general, más proclives a las vacaciones internacionales: si en 2019 casi un tercio de ellos viajó al extranjero (31%), en 2020 no llegaron a una décima parte los que lo hicieron (9%).

Cabe destacar la preferencia por los destinos extranjeros con los que España comparte frontera terrestre, en especial, Portugal, a donde han viajado el 46% de los que estuvieron en un destino internacional. Junto con Francia (16%) y Andorra (5%), suman alrededor de dos tercios (67%) del total de destinos internacionales. En el verano de 2019, las visitas a estos países supusieron menos de un tercio (29%) de todos los viajes por vacaciones al extranjero.

(8) LA NECESARIA VUELTA AL COLEGIO (CUADROS 8a Y 8b)

En el arranque del inicio del curso escolar, la opinión de que los niños deben recibir sus clases en el colegio, aunque no se pueda eliminar totalmente el riesgo de contagio, ha calado en la sociedad: un 70% de los entrevistados la suscribe, alcanzando tanto entre los encuestados con estudios universitarios como entre los que conviven con menores de 16 años el 78%. Un 22%, en cambio, piensa que, mientras no exista una vacuna contra el coronavirus, los niños no deberían ir a la escuela.

Si en esta cuestión se aprecia un amplio consenso, no ocurre lo mismo cuando se pregunta si todas las escuelas de España deberían seguir las mismas reglas para controlar los contagios. Un 46% de los encuestados respalda esta opinión, mientras que un 49% piensa que cada comunidad autónoma debe establecer sus propias normas contra el contagio en las escuelas.

FICHA TÉCNICA

Muestra:
706 residentes en España (Península, Baleares y Canarias) de 14 o más años (96% de nacionalidad española).

Técnica de entrevista
Telefónica (sistema CATI): 58% teléfono fijo y 42% teléfono móvil.

Diseño muestral
Teléfono fijo (58%):
• 1ª etapa: selección aleatoria de municipios con probabilidad equivalente a su tamaño de hábitat.
• 2ª etapa: selección aleatoria del hogar a partir de una base de datos de teléfonos generados de forma aleatoria.
• 3ª etapa: selección del individuo por cuotas de sexo y edad con rellamada.
Teléfono móvil (42%):

• Muestreo aleatorio simple a partir de una base de datos de teléfonos móviles generada de forma aleatoria.br>

Fechas de campo:
Del 4 al 8 de mayo de 2020

Realización de la encuesta:
IMOP Insights.

Funcas

Think tank dedicado a la investigación económica y social

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