Pagos digitales y preferencia por el efectivo como medio de pago en España
Análisis OFT – 26 / 2025
Fecha: 8 julio 2025
LAS CLAVES Según la información más reciente de 2024 del estudio del Banco Central Europeo sobre actitudes de pago (SPACE, por sus siglas en inglés), un 26,4 % de los españoles prefiere pagar en efectivo, frente al 21,9% de media en la zona del euro. En España, los segmentos más proclives al uso del efectivo son los jóvenes de entre 18 y 24 años (30.2%) junto con aquellos entre 55 y 64 años (27,2%), las personas con menor nivel educativo (28,6%) y, en menor medida, las mujeres (27,6%). Según SPACE, solo el 20,5% de los españoles han experimentado en algún momento algún tiempo de dificultad técnica para realizar un pago digital. En muchos casos, estas dificultades técnicas se circunscriben a problemas puntuales, como fallos de conexión a internet, errores en terminales de punto de venta (TPV), incompatibilidades con ciertos dispositivos o aplicaciones, o la falta de cobertura en zonas concretas. El 63 % de los españoles considera importante o muy importante que exista la opción de pagar en efectivo. Dicho porcentaje, similar al de otros países de la eurozona, refleja una cierta preferencia social por conservar el efectivo como medio de pago. |
¿Efectivo o pago digital?
En el contexto actual de transformación digital, las preferencias de los consumidores entre pagos digitales y el uso de efectivo reflejan importantes diferencias entre países de la zona euro. En el caso de España, aunque se observa un avance hacia los pagos digitales, el efectivo sigue teniendo una presencia relativamente fuerte en comparación con la media de la eurozona. Según la información más reciente de 2024 del estudio del Banco Central Europeo sobre actitudes de pago[1] (SPACE, por sus siglas en inglés), un 26,4 % de los españoles prefiere pagar en efectivo, frente al 21,9% de media en la zona euro. Por el contrario, el uso preferente de tarjeta u otros medios digitales alcanza el 48,8% en España, por debajo del 54,8% registrado en el conjunto del área del euro. Un 23,5% de los españoles no muestra una preferencia clara entre efectivo y pagos digitales, porcentaje similar al recogido en el resto de la zona euro (22,8%). Atendiendo a los diferentes segmentos poblacionales se aprecian notables diferencias. En España, los que prefieren en mayor medida pagar en efectivo son los jóvenes de entre 18 y 24 años (30.2%) junto con aquellos entre 55 y 64 años (27,2%), las personas con menor nivel educativo (28,6%) y, en menor medida, las mujeres (27,6%).
Tabla 1. Preferencias en el medio de pago entre los españoles
Efectivo | Tarjeta u otro medio de pago sin efectivo | No tengo una preferencia clara entre efectivo y pagos sin efectivo | No lo sé | |
Zona euro (EA20) | 21,90% | 54,82% | 22,85% | 0,44% |
España | 26,40% | 48,79% | 23,51% | 1,30% |
Género | ||||
Hombre | 25,14% | 49,31% | 24,17% | 1,38% |
Mujer | 27,65% | 48,33% | 22,79% | 1,24% |
Edad | ||||
18-24 años | 30,21% | 51,66% | 17,91% | 0,22% |
25-39 años | 26,26% | 53,73% | 18,95% | 1,06% |
40-54 años | 25,89% | 49,18% | 23,25% | 1,67% |
55-64 años | 27,23% | 41,39% | 30,17% | 1,20% |
65 años o más | 25,01% | 47,69% | 25,68% | 1,62% |
Nivel educativo | ||||
Primaria | 28,64% | 43,93% | 26,36% | 1,06% |
Secundaria | 26,26% | 49,62% | 23,34% | 0,78% |
Universidad/Doctorado | 24,09% | 53,79% | 20,58% | 1,53% |
Barreras y dificultades técnicas en los pagos digitales
Parte de la persistencia en la preferencia por el uso del efectivo en España puede explicarse no solo por razones de privacidad —una motivación habitual—, sino también por la existencia de barreras que dificultan el acceso o la adopción plena de los pagos digitales. Estas barreras pueden ser tanto tecnológicas como sociales. Por ejemplo, algunas personas mayores pueden carecer de los conocimientos digitales necesarios para manejar aplicaciones móviles de pago o banca electrónica. Además, otra barrera relevante que explica la preferencia por el efectivo entre ciertos grupos sociales en España es la falta de comprensión sobre cómo realizar pagos digitales. Aunque las tecnologías de pago han avanzado rápidamente —incluyendo tarjetas contactless, pagos móviles o cajas automáticas de autoservicio— no todos los consumidores se sienten cómodos ni familiarizados con su uso. Esta brecha de conocimiento afecta especialmente a personas de mayor edad o con menor nivel educativo, quienes pueden experimentar inseguridad o desconfianza al utilizar estos métodos. Estas condiciones generan una cierta dependencia mayor del efectivo, no necesariamente por preferencia voluntaria, sino por la falta de alternativas viables o accesibles. En cualquier caso, según SPACE, solo el 20,5% de los españoles han experimentado en algún momento algún tiempo de dificultad técnica para realizar un pago digital. En muchos casos, estas dificultades técnicas se circunscriben a problemas puntuales, como fallos de conexión a internet, errores en terminales de punto de venta (TPV), incompatibilidades con ciertos dispositivos o aplicaciones, o la falta de cobertura en zonas concretas.
Poder pagar en efectivo: una opción valorada
El Gráfico 1 muestra que una parte significativa de la población en la mayoría de los países de la zona euro considera importante o muy importante conservar la opción de pagar en efectivo. Según puede observarse, aproximadamente un 63 % de los españoles considera importante o muy importante poder pagar en efectivo. Dicho porcentaje es ligeramente superior a la media europea y por encima de países como Francia, Bélgica, Finlandia o Italia. En cualquier caso, en todos los países – salvo Países Bajos – dicha preferencia está por encima del 50%, lo que refleja una fuerte preferencia social por conservar el efectivo como medio de pago, incluso en un contexto de creciente digitalización. El efectivo sigue percibiéndose como una herramienta esencial para garantizar la autonomía financiera, la inclusión y la seguridad del consumidor. Esta valoración puede estar vinculada tanto a factores culturales como a realidades prácticas. Una parte de la población, aunque se siente plenamente cómoda e incluida en el ecosistema de pagos digitales, valora la opción de elegir pagar en efectivo, quizás también como un respaldo frente a fallos técnicos que puedan existir a la hora de pagar digitalmente.
Gráfico 1. Porcentaje de población que considera importante o muy importante que exista la opción de pagar en efectivo

Fuente: BCE (SPACE 2024) y elaboración propia
[1]Study on the payment attitudes of consumers in the euro area (SPACE). BCE https://www.ecb.europa.eu/stats/ecb_surveys/space/html/index.en.html